Lecciones y Mitos de la EdR

Son numerosas las referencias nacionales e internacionales, con las que coincide el fGER, sobre las lecciones básicas aprendidas y los mitos desmontados, en relación con la gestión de los residuos domésticos y asimilables, que, obviamente afectan a la Energía de Residuos.

Con el fin de concretar las lecciones y mitos más básicos, se ha tomado como referencia, lo publicado en Alemania, referente en las cuestiones ambientales, por la Agencia para el Desarrollo Sostenible, GIZ, “Waste-to-Energy Options in Muncipal Solid Waste Management”.

Lecciones Básicas

El objetivo de un sistema actual de gestión de residuos, no debe ser eliminar las fracciones residuales, sino abastecer a la economía de materias primas secundarias y energía, a partir de esos residuos.
Los proyectos EdR, no deben competir con la reducción de residuos y la reutilización y las medidas de reciclaje de materiales: con las excepciones en lo que a la MOR se refiere, las diferentes vertientes de la EdR son alternativas de gestión complementarias para el tratamiento de las fracciones de los residuos domésticos, que no pueden ser reciclados por causas técnicas, económicas o medioambientales.

Mitos y Realidades

Entre los “Mitos” más frecuentes y relevantes en torno a la EdR, cabrían destacar:

Mito 1: La Incineración con recuperación de energía (valorización energética), es una solución sencilla para gestionar todos los Residuos Domésticos

Realidad sobre el Mito 1

La valorización energética de los RD, tiene un papel en la economía circular cuando se utiliza para fracciones de residuos no reciclables (rechazos), con valor energético, aunque la decisión sobre esta alternativa de gestión, siendo necesaria, es compleja y requiere una planificación especial.

Mito 2: Una instalación de aprovechamiento energético de Residuos Domésticos, puede financiar sus costes exclusivamente con la venta de energía recuperada o generada

Realidad sobre el Mito 2

La venta no subvencionada de la energía primaria producida (biogás) o generada (en forma de calor y electricidad), podría cubrir en algunos casos, los costos operativos, pero nunca la totalidad de los costos de inversión y capital.

Mito 3: Con una instalación de incineración de residuos Domésticos en operación, se cubriría una gran parte de la demanda de energía de una población significativa”

Realidad sobre el Mito 3

En realidad, la energía de la incineración de Residuos Domésticos, solo podrá contribuir con una pequeña parte de la demanda de la electricidad de una población media a la que pueda servir (aprox. 5%).

La utilización del calor (calefacción de áreas o “district heating”), es la aplicación más eficiente en Europa, pero hasta el día de hoy y por diferentes circunstancias, apenas se utiliza (o apenas se puede utilizar), en España.

Mito 4: Los residuos son una fuente de recursos, por lo que se pueden “vender” a quien los gestiona, tanto para recuperación de energía y materiales

Realidad sobre el Mito 4

En realidad, la EdR no es un modelo de negocio cuyos costos los cubren los ingresos. Los ingresos por ventas de energía ayudan a cubrir parte de los costos generales del tratamiento térmico o de generación de biogas/biometano, pero se requieren tarifas adicionales por el tratamiento dado, u otras formas de ingresos para cubrir los costos completos.

En todos los países, la gestión de residuos en su conjunto, tiene costos y no puede considerarse como una actividad rentable de negocio que dependiera exclusivamente de la venta de energía, de Combustible Derivado de Residuos (CDR) y de los materiales recuperados y reciclados, con las condiciones normales de mercado actuales.